He tenido ocasión de probar estas cuerdas para mandolina, D'Addario EFT74.
No son las que se ven habitualmente de la misma marca, sino un modelo especial, cuya principal característica es que las cuerdas entorchadas son pulidas. Es decir, se les ha aplicado un proceso de alisado en el entorchado, con la finalidad de evitar chasquidos y otros ruidos extraños al mover los dedos sobre ellas.
En guitarra clásica son bastante habituales, para conseguir un sonido más limpio. Es cierto que al tocar con ellas se ahorran muchos ruido parásitos, aunque, en el mundo de la guitarra, se dice que es a cambio de menos potencia y de un sonido más oscuro.
Pero ¿y en la mandolina?. Bien, pues la verdad es que ofrecen una calidad de sonido sobresaliente, potencia suficiente (cosa difícil de valorar, porque, si la hay, la diferencia es pequeña; habría que probarlas comparándolas con otras cuerdas no pulidas en 2 mandolinas identicas) y un sonido especialmente cristalino y definido.
Esto último se incrementa gracias a una cualidad que no esperaba encontrar en estas cuerdas. Se trata de que, la segunda cuerda, es entorchada, igual que la tercera y la cuarta, sólo que, naturalmente, mucho más fina. Pero el hecho de que sea entorchada hace que el sonido de esa cuerda segunda sea mucho mejor de lo habitual.
cómo las segundas son del mismo color que las terceras
y las cuartas.
donde se ve el entorchado pulido.
La segunda cuerda suele ser, normalmente, la que peor suena, pues suele quedar un poco blanda, y eso perjudica tanto a la calidad de sonido como a la afinación. Sin embargo, en este modelo el sonido de la cuerda "la" es magnífico.
En definitiva, si tienes ocasión de probar estas D'Addario EFT74 creo que apreciarás una diferencia importante a mejor respecto a muchos otros modelos.
Dejo aquí una pequeña grabación para hacerse una idea del sonido que ofrecen.